El Papa Francisco ha hablado de una «guerra mundial» contra el matrimonio. «En primer lugar: el matrimonio es imagen de Dios, hombre y mujer en una sola carne, cuando se destruye esto se ensucia o se desfigura la imagen de Dios. Luego la Amoris Laetitia habla de cómo tratar estos casos, cómo tratar a las familias heridas y ahí entra la Misericordia». Con estas palabras, el Papa Francisco, de regreso de su viaje apostólico a Georgia, respondió a las preguntas de los periodistas sobre la «guerra mundial» aparentemente abierta contra el matrimonio.

 «A mí me gusta contar que en la Iglesia de Santa María Magdalena hay una capillita bellísima en Vézelay Abbey, del año 1200 más o menos. Los medievales hacían la catequesis entre las esculturas de la Catedral. En una parte de la capillita está Judas ahorcado, con la lengua afuera y los ojos afuera, y en la otra parte está Jesús el Buen Pastor que lo toma y lo lleva con Él, y si vemos bien la cara de Jesús, los labios de Jesús están tristes en una parte pero con una pequeña sonrisa de complicidad en la otra. ¡Estas personas entendieron que se trataba de la misericordia con Judas!». Son palabras que el Santo Padre relató, a modo de anécdota alusiva a estos ataques.

Fundamento del matrimonio

Por esta razón explicó el Papa, «en Amoris Laetitia se habla del matrimonio, del fundamento del matrimonio, porque luego vienen los problemas: cómo prepararse para el matrimonio, cómo educar a los hijos. En el capítulo 8 se habla de los problemas y de cómo resolverlos, se resuelven con cuatros criterios, acoger a las familias heridas, acompañarlas, discernir cada caso e integrarlas, rehacer, esto sería colaborar en esta recreación maravillosa que ha hecho el Señor con la redención, se entiende así, si se toma una sola cosa no va».

“En Amoris Laetitia, quiero decir, todos van al capítulo 8. No, no. Se debe leer del principio al final, y… ¿cuál es el centro?», continuó el Santo Padre. «Para mí el centro, el núcleo de la Amoris Laetitia es el capítulo cuarto, sirve para toda la vida, pero se debe leer toda, y releerla toda y discutirla toda, es todo un conjunto. Existe el pecado, existe la ruptura, existe también la misericordia, la redención y la curación”.